¿Cómo salir reforzados de una mala experiencia laboral o empresarial?
Tenemos un concepto muy equivocado del fracaso: una cosa es que el resultado de tus esfuerzos no sea el que tú esperabas, y otra muy diferente es fracasar. El verdadero fracaso es no hacer nada, no aprender de tus errores y dejar que la vida te pase por encima. Por lo tanto, mientras pongas en lo que haces toda tu energía y tu talento, no podemos hablar de fracaso.
A nivel laboral, cuando uno se esfuerza por dar lo mejor de sí, está creciendo tanto personal como profesionalmente. Si al final no salió como tú esperabas, puede que en un primer momento haya decepción, pero bien pensado, verás que hay cosas que te habrán hecho feliz, y otras de las que obtener un aprendizaje para no repetirlas.
A nivel empresarial, casi todas las personas emprendedoras tienen varias historias de fracaso antes de poder llegar a la empresa que les hace felices. Es parte del camino, y hay que aprender al mismo tiempo lo que sí debes hacer, y lo que no debes hacer.
Y recuerda: el verdadero fracaso es no intentarlo, no aprender de tus errores, y dejar que la vida te pase por encima.
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